El gusto por el paisaje realista que en Francia había encabezado T. Rosseau y la Escuela de Barbizón estuvo representada por Carlos Haes, figura decisiva en la pintura paisajista española. Haes, pintor hispano-belga, se dedicó a enseñar pintura en la Escuela de San Fernando, promoviendo la reproducción fiel de la naturaleza siguiendo la tradición de Barbizón. Durante la segunda mitad del siglo XX. entre 1886 y 1890, el Impresionismo tiene un gran auge en España, ya que se produce el regreso de diversos pintores españoles que estudiaron en París y en Bruselas, donde entraron en contacto directo con la pintura al aire libre. Este es el caso de pintores como Adolfo Guiard, Aureliano de Beruete, Darío de Regoyos o Joaquín Sorolla, entre otros.
Aldeana del clavel rojo ( 1903) Museo de Bellas Artes de Bilbao |
Adolfo Guiard (1860-1916), pintor bilbaino que en su estancia en París, entre 1878 y 1886, entabló una buena relación con Degas, acercándose al Impresionismo. A su regreso, su estilo ya estaba definido, usando todo la gama de colores, sobre todo verdes y azules, con los contrastes impresionistas así como las perspectivas de Degas, representado cualquier escena de la vida cotidiana. Entre sus obras se encuentran Aldeana del clavel rojo o El Cho.
Aureliano Beruete (1858-1912). Se interesó por la pintura " á plein air" y la luminosidad, todo ello plasmado con una gran armonía de colores grises y azules, para representar diversos paisajes de Madrid y Toledo. Algunas de sus obras son Orillas del Manzanares o Espinos en flor.
Darío de Regoyos (1857-1913). Formado en la Escuela de San Fernando de mano de su maestro, Carlos Haes. Viajó a París y a Bruselas donde conoció a Degas. Monet, Signac y Pisarro. Destaca por sus paisajes castellanos y sus escenas portuarias del cantábrico con obras como La concha o Plaza de Bilbao.
Bibliografía
Orillas del Manzanares ( 1895) Museo del Prado |
La concha (1906) Museo Thyssen, Málaga. |
- Rodríguez Alcalde, L., Los maestros del Impresionismo español, Madrid, 1978